20/01/2017 Gaudí por descubrir: Candelabros de la Capilla del Col.legi Jesús-Maria

"Al morir su hermana en 1879, Antoni Gaudí se hizo cargo de su sobrina, Rosa Egea, a la que internó en el Colegio de Jesús María de Tarragona. A partir del contacto con esta orden de religiosas surgieron un par de encargos para el arquitecto. El primero que llevó a cabo fue la realización de diferentes elementos para la iglesia del Colegio de Jesús María de Sant Andreu de Palomar –antiguo municipio que actualmente está incorporado a la ciudad de Barcelona. Para esta iglesia, construida entre 1876 y 1881, Gaudí realizó, a partir de 1879, un altar de estilo neogótico, un custodio de influencia bizantina, un pavimento mosaico de inspiración romana y una serie de candelabros de pared. El altar y el custodio desaparecieron en el incendio del templo durante la Semana Trágica de 1909. En la iglesia, actualmente la parroquia de Sant Pacià, tan solo se conserva parte del mosaico, realizado con piezas de mármol, vidrio y terracota de diversos colores, que dibujan formas geométricas y flores. Los candelabros también se conservan, en este caso en el Colegio de Jesús María de Sant Gervasi de Cassoles, donde fueron trasladados por las religiosas en 1890, cuando vendieron el colegio de Sant Andreu de Palomar a los Hermanos Maristas. Se trata de originales apliques de madera dorada en los que la vela se sujeta en la boca de un dragón alado".

Ver: http://www.gaudiexperiencia.com/es/decoraci%C3%B3n-mobiliario-y-dise%C3%B1o/altar-y-decoraci%C3%B3n-de-la-iglesia-de-jes%C3%BAs-mar%C3%AD-de-sant-andreu-del

"Dos Lámparas de Gaudí inéditas
Las religiosas de Jesús-María establecieron colegios para señoritas en Tarragona y en Sant Andreu del Palomar, mediado el siglo XIX. El arquitecto y catedrático Juan Torras Guardiola, hijo de Sant Andreu, construyó para las monjas una iglesia de estilo neogótico que actualmente es la parroquia de San Paciano y en la que hubo un altar con un gran retablo proyectado por Antonio Gaudí. Un Gaudí muy joven (1879) que siguió el estilo de su amigo y maestro Juan Martorell Montells. En el presbiterio además del altar y el retablo, retro tabulum, se colocaron cuatro lámparas colgantes adheridas al muro, hechas de madera sobredorada con la representación un pájaro ceñido por una serpiente. En 1890 las religiosas de Jesús-María vendieron el colegio y la capilla a los Hermanos Maristas y se instalaron en el recién construido gran colegio del paseo de Sant Gervasi, obra el arquitecto Enrique Sagnier Villavecchia. Con todo algunos elementos de la capilla de Sant Andreu fueron trasladas el nuevo colegio. Entre otras cosas las cuatro lámparas de madera dorada del presbiterio de la capilla. Cuando en 1969 realicé la restauración del altar de Gaudí (1880) para la capilla del Colegio de Tarragona, situada en la calle Méndez Núñez, fui informado de la existencia de tales elementos gaudinianos y, personado en el colegio de Sant Gervasi, pude ver y fotografiar, en el vestíbulo de la capilla, dos de las lámparas de Gaudí que publiqué en mi monografía “Las obras de Gaudí para las religiosas de Jesús-María” (Barcelona, 1969) y, más tarde en “El gran Gaudí” (Sabadell, 1989). Menos mal porque la capilla de San Andrés fue incendiada en el curso de la Semana Trágica de julio de 1909 y se perdió el altar de Gaudí del que solo queda una fotografía en el archivo del Colegio de Sant Gervasi con el epígrafe La chapelle de Saint André en grand fête”. Esta foto fue publicada en 2002 por ABC Cataluña. En esta foto se ven las cuatro lámparas de madera dorada. Pues bien debidamente informado por la madre archivera del Colegio, entré en conocimiento de la existencia de las otras dos lámparas de Gaudí que están situadas en la sacristía de la capilla. Acompañado de la madre archivera, de su hermana la madre María del Claustro Bonet y de la madre sacristana, el pasado 28 de noviembre visité el colegio de Sant Gervasi, vi las dos lámparas de la antecapilla y, detrás del altar por la puerta de la sacristía penetré en su interior y pude fotografiar las dos lámparas enmarcando un Cruicifijo. Ahora se publican por primera vez y completan el cuarteto que Gaudí proyectó. Parece mentira pero después de 76 años de la muerte de Gaudí aun es posible dar a conocer obras suyas y así completar los innumerables y a veces repetitivos estudios sobre el gran arquitecto.
Juan Bassegoda i Nonell, Conservador de la Real Cátedra Gaudí
Barcelona, viernes 5 de diciembre de 2003"

Ver: http://www.gaudiclub.com/esp/e_equipo/cg/lamparas.asp