"Mencionada en 967, en 1972 se emprendió una restauración para devolverla a su aspecto primigenio, en la medida de lo posible, tras los grandes cambios sufridos entre los siglos XVII y XX. Levantada en 1060, de nave única. En la cabecera conserva el ábside semicircular con arcuaciones ciegas y lesenas de tipo lombardo. Desaparecieron las absidiolas dedicadas a san Juan y san Miguel cuando se hicieron la sacristía y varias capillas, como la del Roser a mediodía, en 1607 y la de San Juan Evangelista (nuevamente) y San Isidro, en tramontana.
En el siglo XII se añadió un portal a la fachada de mediodía y en el XIII, se traslada a poniente cobijado bajo un gran atrio, que resultaría absorbido en la nave en el siglo XVII. Se sacan del interior dos sarcófagos góticos que se sitúan en ambos laterales de la portada, bajo arcosolis. En el siglo XVIII, la fachada se eleva por encima de la altura de la bóveda de cañón. Se crea, en fin, un piso en medio de aquél y el tejado para evitar humedades, donde hubo más tarde, la escuela y el ayuntamiento (techo muerto de las ventanillas), se hace la fachada nueva y se reforma el interior en estilo barroco. La capilla del Santísimo sustituye a las anteriores del lado de tramontana. Encima, el campanario de espadaña, con contrafuertes y decoraciones sinuosas, culminadas con bolas de piedra. El aparato de los muros es distinto según la época.
En el intradós de los arcos de entrada, decorados con formas geométricas y florales, hay cuatro columnas coronadas con capiteles, situados a la inversa de cómo estaban originalmente y con los fustes y bases nuevas. Las decoraciones de los capiteles son: unos, de temática vegetal y otros, figurativos, con una sirena pez, símbolo de la tentación y un águila con las alas abiertas, símbolo de san Juan Evangelista.
Una de las pilas bautismales tiene forma de copa asentada sobre una columna cilíndrica con anillas en la base. Es de una pieza, maciza y de considerables dimensiones. Conserva restos de policromía. Se desconoce cuándo se hizo, pero se sabe que en 1845 se bautizó a mosén Cinto. La otra pila es más moderna y la piedra más trabajada. Presenta unos relieves con decoraciones florales que rodean una cruz flanqueada por el alfa y el omega.
Durante la Guerra Civil, la iglesia fue garaje. Se perdieron los sarcófagos pero en 1940 se restituyó la puerta románica bajo un tejado triangular, en una reconstrucción dirigida por Camil Pallàs. A mediodía, un relieve de Manolo Hugué (Sembrador, 1945) ocupa el tímpano de la portada que quedó cegada."
Ver: https://www.poblesdecatalunya.cat/element.php?e=11214
Plaça Verdaguer
Fotos: Jordi Noguera















No hay comentarios:
Publicar un comentario