POR JOAN BASSEGODA NONEL
Actualizado 15/03/2010 - 11:21:21
En el mes de
diciembre de 1881 se inauguró la iluminación eléctrica de Barcelona
mediante quince farolas en el paseo de Colón. La tarea la llevó adelante
la Sociedad Española de Electricidad, creada en 1875 por el ingeniero
Narciso Xifra Masmitjà (1848-1934), que contó con la colaboración del
también ingeniero Tomás J. Dalmau.
Con todo el año
anterior, o sea 1880, José Sarramalera Aleu, ingeniero y director de la
compañía industrial que llevaba su nombre, había presentado al
Ayuntamiento otro proyecto de iluminación eléctrica, más ambicioso y
completo, que no se llegó a realizar. El estudio artístico del proyecto
lo encargó Sarramalera a Antonio Gaudí, al que conoció en la Escuela de
Arquitectura cuando inició la carrera que luego cambiaría por la
ingeniería. Gaudí trabajó en la sociedad Padrós & Borràs donde
Sarramalera también colaboró en los últimos tiempos de estudiante con un
proyecto de tranvía eléctrico que debía unir la puerta de la Paz con
los jardines de Villa Arcadia en la montaña de Montjuïc.
Ocho farolas
Gaudí,
que ya había realizado en 1878 un proyecto de farolas de gas que se
instalaron en la plaza Real y plaza de Palacio, imaginó unas enormes
farolas de más de veinte metros de altura adornadas con los nombres de
los almirantes catalanes más famosos como Llúria, Mallol, Rocafort,
Marquet y Cortada. También se podían leer nombres de batallas
importantes como las de Artaqui o Filadelfia, junto con escudos
heráldicos que Gaudí tomó de la Armería Estruch de la Rambla de
Cataluña.
De este proyecto, que por ser tan atrevido
debió espantar a las autoridades municipales, se tiene noticia por tres
dibujos de Gaudí. Dos de ellos, que mostraban distintas soluciones de
las farolas en alzado, los publicó Ràfols en su biografía de Gaudí en
1929 y desaparecieron con la quema del archivo de Gaudí en la Sagrada
Familia, en julio de 1936.
El tercero, también
publicado en 1929, quedó en poder de Ràfols, que lo retuvo cuando hizo
la ordenación de los dibujos que Gaudí tenía en su casa del parque
Güell. La viuda de dicho historiador y arquitecto lo entregó al autor de
este artículo el 19 de enero de 1968. Este dibujo merece un especial
comentario pues se trata de una perspectiva a vista de pájaro del puerto
y la parte baja de la ciudad de Barcelona. En el dibujo, Gaudí
consideraba libre todo el frente marítimo de Barcelona, después de la
caída de la muralla de Mar i del Baluart de les Puces junto a las
Atarazanas. Con esta base situaba ocho de sus monumentales farolas en
sitios estratégicos, pero con visión de futuro, ya que algunos se
proyectaban al final de unas calles que solo existían en el proyecto de
Ensanche de Cerdà de 1859 que, por lo que las vías del Casco Antiguo se
refiere, no se empezó hasta el comienzo de la Gran Vía «A», hoy Vía
Layetana, en 1907.
Gran Vía «C»
Las
farolas de Gaudí se colocaban la primera en el comienzo de la carretera
de Can Tunis para subir a Montjuïc, la segunda al final de la entonces
inexistente Gran Vía «C» que se abrió mucho más tarde y que recibió el
nombre de García Morato, hoy Drassanes. La tercera estaba al final de
las Ramblas, justo donde en 1888 Cayetano Buigas Monravà construyó el
monumento a Colón. La siguiente estaba frente a la plaza del duque de
Medinaceli, donde ya había el monumento de hierro colado al almirante
Galcerán Marquet, obra del arquitecto Francisco D. Molina Casamajó. Otra
farola se situaba al final de la calle de Simón Oller, que es
prolongación de la de Aviñón. La siguiente farola quedaba al final de la
inexistente Vía Layetana, es decir, donde estaban entonces los arcos de
Los Encantes, junto a la casa de la Lonja de Mar.
En
el esquemático pero interesante dibujo de Gaudí se pueden ver la
iglesia de Santa María de la Mar, los pórticos de Xifré y hasta el
monumento llamado del genio catalán en la plaza de Palacio. La séptima
farola aparece, donde más tarde estuvo la Casa de Máquinas del puerto y
la octava, en el sitio que luego ocupó el Depósito Mercantil. El dibujo
de Gaudí continúa con lo que fuera «la Machina», una grúa de gran
potencia y acaba con la escollera antigua, con la Capitanía del Puerto y
la llamada Linterna Vieja. También se puede ver en el dibujo un esbozo
de la catedral de Barcelona y el trazado de las distintas calles de la
ciudad. Es posible ver en el dibujo el embarcadero de la Puerta de la
Paz y diversos veleros surtos en el puerto.
Cartulina
El
dibujo lo hizo Gaudí sobre una cartulina que era su tarjeta personal,
de las pocas que mandó imprimir a lo largo de toda su carrera. Fue
cuando estableció su primer despacho profesional. La tarjeta contiene un
texto dibujado de la mano de Gaudí que reza: «Antº. Gaudí, arquitecto.
Bufe- te=Call-11-3», impreso en litografía. La tarjeta, en cuyo dorso
dibujó Gaudí la perspectiva axonométrica de Barcelona mide 13,5 por 24
cm. Durante cierto tiempo tuvo Gaudí su despacho en el tercer piso del
número 11 de la calle del Call, muy cerca de la plaza de San Jaime.
El
edificio se ha conservado tal como lo habitó Gaudí. El nombre del
arquitecto impreso en la tarjeta muestra unos trazos muy floridos con lo
que, sin duda, el novel arquitecto, la tarjeta se imprimió en 1878, el
mismo año en que Gaudí ganó su título profesional, intentaba atraer a
los clientes, cosa difícil para un forastero en la ciudad sin apenas
relación social alguna.
El proyecto de Gaudí para la
iluminación del paseo, que se llamó de la Muralla de Mar y luego de
Colón y de Isabel I, demuestra que el recién laureado alarife estaba al
tanto del progreso de la ciudad de Barcelona en el campo de la
electricidad y del urbanismo que soñó Ildefonso Cerdà hace 150 años."
Fotos propias de la ponencia "Más luz sobre las farolas monumentales de Gaudí" de Xavier Jové en el Tercer Congreso Mundial Gaudí 2018
Sorprendente¡¡
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